Francisco Vizcaya, fundador de FINAE, nos compartió qué es lo que no puedes dejar de tomar en cuenta al momento de emprender.
FINAE es quizá uno de los mayores casos de éxito de empresas sociales en México, ya que ha logrado consolidar lo que muchas veces es un gran reto para las empresas con impacto: crear un modelo que resuelva un problema social, al mismo tiempo que se convierte en un negocio rentable.
Esta institución ofrece financiamiento educativo para estudiantes de nivel socioeconómico medio bajo y bajo para que tengan acceso a estudiar la universidad, impactando así la vida de miles de jóvenes. Hace unas semanas, tuve la oportunidad de entrevistar a su fundador, Francisco Vizcaya, quien nos platicó todo sobre su experiencia:
De banquero a emprendedor social
Personalmente me encanta la historia de Francisco y FINAE, ya que es muy distinta a la de la mayoría de los emprendedores sociales que hoy están iniciando.
Muchos de los que buscan emprender socialmente, inician sus proyectos queriendo resolver una problemática por lo que saben que necesitan desarrollar un modelo de negocios que les permita sustentar esa solución y hacerla escalable.
El caso de Francisco es el opuesto, después de muchos años de haber desarrollado una carrera en distintas instituciones financieras reconocidas en todo el país, se dio cuenta que existía una gran oportunidad de negocio y que nadie estaba ofreciendo financiamiento a estudiantes que buscaban apoyo para pagar sus estudios universitarios.
Para Francisco esto se vio como una gran oportunidad de negocio, por lo que decidió dejar una carrera cómoda y estable para lanzarse al ruedo del emprendimiento.
En un inicio, la motivación de él y sus socios era principalmente la de crear un buen negocio, sin embargo, una vez que iniciaron su trabajo, se dieron cuenta de que si se enfocaban en jóvenes de niveles socioeconómicos vulnerables, no sólo tendrían una gran oportunidad de negocio, sino que además podrían generar un importante impacto en la sociedad.
Según cifras del Banco Mundial, en México 7.5 millones de jóvenes entre 15 y 29 años no estudian ni trabajan, esto significa un 25% de la población de esta edad. La falta de oportunidades de estudio es un problema real que tiene un impacto devastador en la vida de los jóvenes y en el desarrollo del país.
“Sabemos que educar a los jóvenes mexicanos es contribuir con el futuro del país y al crecimiento de una clase media pujante. Nuestra razón de ser son los estudiantes de la base de la pirámide que no tienen la oportunidad de acceder a la educación superior de calidad».
Viendo esto, es que FINAE se transformó, y lo que inició simplemente como una gran idea hoy se ha convertido en una empresa social que ha otorgado financiamiento educativo a más de 10,000 jóvenes en la base de la pirámide.
Impacto social en serio
Cabe recalcar que para FINAE, el impacto social de la empresa no es algo secundario a su modelo de negocio, sino el principal motivador de su trabajo.
Como muestra, podemos ver que la empresa se rige con los más altos estándares de impacto social reconocidos a nivel mundial, por ejemplo:
- FINAE es una Empresa B certificada, reconocidos por B Corp, la mayor certificación a nivel mundial.
- Recibieron el reconocimiento “The Best of the World” de B Corp, que se entrega a las mejores Empresas B.
- Obtuvieron 4 de 5 estrellas posibles en la calificación GIIRS “”, la medición de impacto más importante para empresas sociales.
- Son reconocidos por el Banco Interamericano de Desarrollo BID dentro de “Oportunidades para la Mayoría”, quienes reconocen modelos de negocio enfocados a la base de la pirámide.
La gran lección
FINAE es importante porque nos deja una gran lección para todos aquellos que queremos ser emprendedores sociales y es que: independientemente del guiarnos a través del impacto que queremos lograr, de nada va a servir si es que no logramos desarrollar un buenmodelo de negocio que sea sostenible, escalable que genere utilidades.
No sólo es el caso de FINAE. Hay otros casos de éxito como lo es Sala Uno, en el cual fundadores tienen muy presente que entre más clara sea la misión de impacto, más comercial es el modelo de negocio, por lo tanto, hay más crecimiento y más ayuda a las personas.
Si quieres escuchar la entrevista que también tuvimos con el fundador de Sala Uno, puedes encontrarla aquí.
Aunque ya lo hemos dicho antes, nunca sobra recalcar que las empresas sociales antes que nada SON EMPRESAS, por lo que no podrán ser exitosas si no logran desarrollar un modelo comercial exitoso.